Villa Argentina

«Hoy están acá junto a Dios, porque esto es un milagro, un milagro que hemos hecho nosotros.»

Hermana Cristina, Iglesia del Néstor de los Últimos Días. Barracas, 9/9/2013.

Las palabras sonaron un tanto exageradas para la inauguración de una obra pública en la Villa 21 del barrio de Barracas. Más si tenemos en cuenta que Cristina también es la realizadora del milagro de ser multimillonaria viviendo del Estado. Sin embargo, la Presi le metió garra y se puso a trabajar para mejorar las perspectivas a futuro de quienes más lo necesitan: sus candidatos.

Muchos se emocionaron con la presencia de la Presi. Es lo más cercano que puede estar una persona de conocer a Dios, ese que te cuentan que cuida por vos, que se preocupa por vos, del que no se sabe bien si es o no el creador de tu mundo de mierda, pero a quien no podés cuestionar dado que obra de formas misteriosas. Sin embargo, te obligan a adorarlo para obtener la salvación, si pinta, porque te ama. Y en este caso te ama tanto, pero tanto, que te mantiene así, totalmente pobre.

Aún no sabés cuál es tu culpa, si solo tuviste la suerte de nacer acá, pero los miembros de la Iglesia de Néstor de los Últimos Días te convencieron de que sos portador del pecado original, algo así como que todo lo malo que te pasa no es tu culpa, pero es como si lo fuera, dado que cargás sobre tus espaldas los errores de personas que ya no están.

El gobierno dijo que probablemente existieran algunas pequeñas deudas pendientes y por algún lado había que arrancar. Ahora que ya terminaron con lo vital y esencial en la villa 21, quizás en un futuro puedan abordar los detalles superfluos, esos lujos que nunca están de más, como lograr que la parada de bondi más cercana no quede a veinte cuadras, o que los colectiveros puedan circular por adentro sin perder un dedo en cada viaje.

Hoy es la Secretaría de Cultura la que se instala en la Villa 21, y esperemos que no sea el único caso. Si las instituciones que supuestamente están para modificar las realidades, serán trasladadas a los lugares insignias de las realidades no modificadas por dichas instituciones, para ser coherentes, se debería mudar el ministerio de Economía a alguna cueva de la calle Libertad. Ya que estamos, al ministerio de Seguridad se lo podría mudar a cualquier aguantadero y colocar oficinas de atención al público en cada puterío. Por último, el ministerio de Defensa se podría instalar en el museo de ciencias naturales, donde las Fuerzas Armadas convivirían con el resto de las especies extintas.

Hablar de los asentamientos precarios es un tema un tanto complejo y peligroso de abordar sin herir susceptibilidades. De todos modos, si empezamos por reconocer que ya no añadimos el término «de emergencia» a la villa, tenemos más de la mitad del camino resuelto.

La existencia de las villas es un buen negocio para el Estado y por eso nadie se calienta en abordarlo. Si las villas resultaran un problema real para la subsistencia de un gobierno, ya habrían sido reguladas. Por el lugar que ocupan, la inmensa mayoría de los asentamientos son inofensivos para los funcionarios, que por lo general viven en barrios más cómodos. Los que se trasladan en helicóptero para ir de Olivos a la Rosada, ni sienten la intranquilidad moral de ver las construcciones -que ningún arquitecto se atrevería a denominar edificio- que asoman entre los barandales de la avenida Lugones cuando empalma con la 9 de Julio.

Una de las grandes paradojas del sistema de recaudación impositiva deriva en que a nadie con poder de decisión real le importe la existencia de una villa, ni siquiera para el cobro de impuestos. Las provincias no recaudan los impuestos municipales, y lo que correspondería al impuesto a la propiedad inmueble, no merece el esfuerzo de convertir el asentamiento en una zona residencial como la gente. Asfaltar calles, construir escuelas en proporción a la cantidad de alumnos, pagar a los ingratos de los docentes, establecer una comisaría y su dotación, no son costos que puedan recuperarse con recaudación de impuestos en lo que dura una gestión. Por su parte, al Estado Nacional le da exactamente igual: los habitantes de las villas pagan el mismo impuesto al consumo que los vecinos de Puerto Madero, cada vez que dejan el 21% de IVA en la compra de un jabón de tocador.

Los asentamientos precarios no siempre tuvieron inicios de ocupación ilegal. El primero que se recuerde existió en la década del ´30 y fue creado por el mismísimo gobierno nacional, el cual no sólo permitió la permanencia de inmigrantes que huían del hambre de Polonia, si no que cedió treinta vagones de tren para que vivieran como pudieran. Para darle un tinte menos trágico, el asentamiento se llamó «Villa Esperanza». Si bien fue demolida unos años después, el terreno ya era tentador. Hoy es la villa 31.

La denominación Villa Miseria se la debemos al escritor Bernardo Verbitsky –padre de Horacio– que a principios de los años cincuenta escribió unos textos en el desaparecido diario Noticias Gráficas sobre los asentamientos. Tiempo más tarde, quedaría inmortalizado en su libro «Villa Miseria también es América». Algunos intentaron poner un dejo de esperanza al denominarlas villas de emergencia, con lo que intentaban no cerrar la ventana a una chance de mejora social: es una situación de emergencia, se está de paso. Durante años funcionó así para mucha gente En las últimas décadas, los únicos que logran movilidad social ascendente habiendo nacido en una villa son los futbolistas que llegaron a jugar en primera, los punteros y los narcos.

Históricamente, el villero siempre buscó zafar. La marginalidad como norma general dentro de las villas es más bien moderna: creció con la hiperinflación, se perfeccionó durante los noventa, se convirtió en heróica en la crisis del 2001 y pasó a ser parte de la cultura popular en la década ganada. Más de veinte años de éxito ininterrumpido en la creación de generaciones que ya no recuerdan cuáles de sus ancestros fueron los últimos en tener un ingreso digno y estable. El término villero dejó de ser despectivo y se convirtió en orgullo gracias al cambio de siglo. Las tribus urbanas de clases bajas por años se identificaron con la cultura rolinga y consumían rock de la banda británica o el producido por sus tristes clones locales, o con grupos tropicales de música festiva y letras picarescas. Sin embargo, a fines de los noventa y con la cumbia animando las fiestas de la high society en plena Quinta de Olivos, la villa empezó a cobrar protagonismo más allá del paisaje urbano. La llegada de la cumbia villera hizo el resto. De pronto, fue normal cruzarse por la calle con un adolescente con uniforme de colegio privado que tararea «Colate un dedo» de Pibes Chorros.

A mi humilde entender, el surgimiento de la cultura villera fue de las peores cosas que le pudo pasar a los habitantes de las grandes urbes argentinas -y esto incluye a los propios villeros- en cuanto a consciencia social refiere. La aceptación de la existencia de un otro radicalmente distinto al que se teme y desprecia, pero del que se consume su cultura por moda; un extraterrestre que habita en el Área 51 que se encuentra tras la terminal de micros en Retiro, o en Villa La Antena de La Matanza. El sentimiento de temor y desprecio es recíproco: así como muchos piensan que el villero no es un tipo que nació y creció en una realidad de mierda, sino que es un humanoide prescindible, muchos de ellos no pueden comprender de manera lógica la relación herencia-trabajo-poder adquisitivo de los demás estratos sociales.

La aceptación de la cultura villera como un elemento colorido del gen argentino también acarrea políticas pedorras y deshumanizantes, curiosamente propulsadas y defendidas por gente que se define progresista y que a la villa va para sentirse mejor persona. La mayoría de las medidas aplicadas son para mantener a los villeros bien dentro de sus barrios. Suponer que armar un ciclo de películas de la villa coloca a la misma en plano de igualdad con los demás barrios residenciales, es prácticamente insultante. Si nos sacan la posibilidad del afuera, todos creeremos que nuestra realidad es inmodificable.

Tanto que se habla de la movilidad social ascendente, nadie tiene en cuenta el deseo de querer otra realidad para nosotros y nuestros hijos. Nadie cambiaría su realidad si no deseara otra. Obviamente, para desearla primero hay que conocerla. Y para no mandarnos cagadas, hay que saber cómo alcanzar esa realidad deseada. ¿O acaso todavía debemos creer que nuestros abuelos vinieron a la Argentina sólo porque huían del hambre? Si no hubieran sabido que acá podían estar mejor, ni se habrían acercado al puerto.

Ya que hablamos de la Villa 21-24 -La Zavaleta, para los íntimos- alguien debería considerar que muchos padres buscan colocar a sus hijos en escuelas que se encuentren fuera de la villa, a pesar de existir varios establecimientos de educación inicial, primaria, media, y hasta una escuela de formación laboral que subsiste en parte por los aportes del gobierno de la Ciudad, y otro tanto por donaciones privadas.

Son las ganas del afuera, el deseo de que los hijos tengan una vida mejor que aquella que les toco a sus padres. Para ello, tienen que saber que existe una vida mejor, para que el deseo los movilice. En sus televisores ven los mismos comerciales que cualquiera de nosotros, y al no ser marcianos, quieren comprar las mismas cosas que nosotros. Sin embargo, al igual que nosotros, el deseo del consumo no es igual al del progreso. Nosotros podemos llegar a hipotecar la casa y el futuro de nuestros hijos sólo porque se nos antojó algo que no podemos pagar. El que no tiene qué hipotecar, igualmente buscará la forma de satisfacer su deseo consumista. Nosotros podríamos tener una vida mejor, sólo que no la podemos pagar. Los más humildes podrían tener una vida mejor, pero no saben que pueden conseguirlo. Esto es algo que horroriza a cualquier progre que se precie de tal, dado que si el más humilde pretende dejar de serlo, ya no tendrían sentido las políticas limosneras y deberían buscar la forma de emparejar hacia la cultura productiva. Y hacer cosas productivas es algo que escapa de la cosmovisión de la cofradía de los ensayistas.

Parece mentira que a la misma clase dirigente que viaja para ver cómo funcionan las experiencias ajenas, no se les haya ocurrido aplicar lo mismo puertas para dentro. No es lo mismo montar un teatro itinerante por las villas que facilitar entradas para el teatro al que concurren el resto de los mortales. Este es el país en el que por ley se reserva un cupo femenino en cada lista legislativa, pero a nadie le pareció buena idea que en cada sala de cine se habilite un cupo de entradas gratuitas para los que no tienen con qué pagarlas.

Una villa se puede urbanizar. Pero si se mantiene el culto a la marginalidad misógina y delincuente, en la que el cuánto valés se mide con la escala Motomel, y donde ser madre a los 14 y abuela a los 28 es la única contribución a la sociedad que se tiene al alcance de la mano, será en vano. El problema no es sólo la villa, si no la marginalidad. Y si esto no fuera así, el complejo habitacional Ejército de los Andes no sería conocido como Fuerte Apache.

La historia reciente demuestra que todas aquellas políticas que se venden como inclusivas, en su mayoría son discriminatorias, y para muchos está bien que sea de ese modo, en una actitud ligada a un trauma emocional que genera la necesidad de sobreproteger al otro sin enseñarle a protegerse solo. No vaya a ser cosa que la movilidad social ascendente derive en que los necesitados dejen de necesitarlos y terminen compitiendo por sus puestos de trabajo.

«Este es apenas uno de los misterios de la economía marginal en las ciudades latinoamericanas, un misterio que los planificadores, ya sean desarrollistas, keynesianos, friedmanianos o marxistas, prefieren no enfrentar. La marginalidad es el moderno e implacable Waterloo de capitalistas, tecnócratas, dictadores y hasta revolucionarios».

La Calcutización de las ciudades latinoamericanas. Ted Córdova Claure. 1984

Martes. Sin cambio de paradigmas culturales, la realidad social será idéntica, sólo que tendrá paredes con revoque y techo con cielorraso.

Nicolás Lucca

 

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1.312 respuestas

  1. El que googlea/guarda comentarios sos vos servíce no corras el arco. Contestate vos mismo porque lo haces.
    deja la sintaxis para tu hermana y contesta una sencilla pregunta no boludees,
    deci que es un hobby que lo haces de pelotudo o simplemente cállate.

  2. Che…
    ¿Cómo sabe que los «servicios» guardan / googlean comentarios de comentaristas completamente intrascendentes (los cuales me divierte sacar de quicio, porque además de intrascendentes representan / suscriben una ideología nefasta)? Yo no tenía idea de que los «servicios» se dedicaban a eso. Y tampoco suena mu lógico que digamos. Que se yo… A un «sevicio» me lo imagino haciendo algo más sofisticado que copiar un comentario de papu.
    Mmm…

  3. En todo caso comemierda lo que es luce es tu incapacidad discursiva para hacerme entender porque que perdes el tiempo en guardar y/o googlear comentarios al mejor estilo servicio.
    Espero que tomes nota de tu falencia.
    Saludos a tu «mamita»
    mogolito, segui tratando de revolverte en la mierda, en el bcra no hay un puto billete, porque vos te cabe tambien la pregunta ¿sos testigo de la existencia de las reservas? o lo tuyo es una simple profecion de fe al mejor estilo mormon?.

  4. Pero caramba… otra vez dejaron la puerta abierta del asilo de oligofrénicos ineducables. Y cosmito se agenció una pc y empieza con sus cretinadas de siempre.
    Cosmito, dejá la pc. Debo además remarcar tu notable respuesta. Me dejaste atónito, patitieso y al borde del KO.
    No sos más imbécil porque no tenés más tiempo, mr falacia.

  5. Bueno.
    No apareció Fuegián, pero en su lugar lo tenemos a «tanguero viejo», edificándonos con sus acostumbradas piezas magistrales de la argumentación de ayer, de hoy, y de siempre.
    Algo es algo.

  6. errata: «…con LOS seis millones…» (no vaya a ser que aparezca el que ya sabemos, y al carecer de argumentos para discutir seriamente el tema «C» -desaparecidos por el terrorismo de estado- , luego de ser palizeado, saque a relucir el tema «D» -gramática-)

  7. marce estás muy sacadito. No entiendo, no la tenés reclara?
    Ah, quisiera saber por qué los milicos están en cana y los jefes de los montos no. No ponían bombas? No mataban?
    Ah, quizá la vida de un pobre civil no valía lo mismo que la de un «militante». Qué sé yo.
    Cosmo, seguí escribiendo esos choclazos… no los lee nadie, pero vos te sentís muy importante. Y por cierto, después podés escribir muy orondo:»les gané. Les di la paliza.»
    En serio, los 2 son la pareja ideal. Se complementan bárbaro: uno más pelotudo que el otro.
    Y mis clones piensan lo mismo.

  8. – Sr. Videla: Necesito los legajos de los desaparecidos durante su gobierno.
    – Ah…si….justo los estaba pasando a Word. Dame un pen drive, aguantame un toque y te los copio.

  9. Interesante digresión, la de los mismos de siempre…
    Ya lo dije en otro espacio:
    Como bien lo dijo E. L. Duhalde, sólo los criminales pueden dar cuenta con certeza de ese número.
    Y no lo hicieron ni lo hacen.
    ¿Qué hacemos entonces?
    ¿Dejamos de hablar del tema porque no se puede llegar a conocer que fueron, ponele, 9.213, 20.504, o 29.456 desaparecidos?
    Con las seis millones de seres humanos exterminados por el nazismo no son tan celosos, y la cifra también es estimativa. Muy acercada a la realidad, pero estimativa*
    ¿Qué pretenden que digan los libros de historia? ¿El nazismo asesinó a muchas personas solo porque no podemos dar cuenta de que fueron 6.234.971 personas?
    ¿Qué hay detrás de esta crítica, en realidad?
    ¿Será que pretenderán que, poniendo la excusa de que no se puede llegar a conocer el número con precisión quirúrgica, entonces no se hable más del tema?
    El caso Reato parece claro: supongamos que fuera un «buen periodista de investigación» (con muchísimas comillas),;. lo cierto es que muchas de sus investigaciones buscan dilucidar cuestiones irrelevantes pero que servirían para minimizar el accionar del terrorismo de estado
    Y eso genera, como mínimo, sospechas.
    Reato, en el mejor de los casos, me recuerda a esos científicos genetistas (los menos, afortunadamente) que intentan (infructuosamente, siempre terminan siendo refutados), a como de lugar, demostrar que los negros son biológicamente menos inteligentes que los blancos.
    Y acá en el foro tenemos un ejemplo (sin chapa de científico, pero ejemplo al fin) de ello: cuando se le preguntó (sí, si, estoy hablando de Fuegián) con qué fin buscaba (y busca, solo basta ir unos comentarios para atrás) probar con tanta pasión que los negros son menos inteligentes que los blancos, no supo que responder y solo alcanzó a balbucear algo así como que lo hacía por «curiosidad» y «afán de búsqueda de la verdad» (un cinismo a prueba de balas)
    ¿Cuál sería la razón de intentar demostrar algo tan «útil» y «relevante» como la trayectoria exacta que toma cada una de las gotas de agua en una tormenta de verano?
    Curiosamente (?), en sitios como Metapedia suelen devanarse los sesos (si es que podemos hablar de sesos) intentando demostrar esta clase de cosas.
    *De hecho, no conozco genocidio en el cual se haya llegado con la certeza que piden algunos aquí. No por casualidad, todos los saldos de los genocidios históricos parecen ser estimativos, incluso, los que contaron con la colaboración de algunos de sus perpetradores para el esclarecimiento.
    ¿Alguien conoce algún caso diferente?

  10. Usé la cantidad de líneas que juzgué necesarias para la audiencia. A otra audiencia le hubiera bastado con una línea. O ninguna. Pero bueno, así estamos…

  11. Olegario
    El 30.000 que taaaaaaaaaaaaaanto te molesta no es un invento K. Viene de la época de Alfonsín (+)
    Igual ya que taaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaanto te interesa:
    http://www.prensa.argentina.ar/2013/03/25/39365-se-formalizo-la-reparacion-de-legajos-de-detenidos-desaparecidos.php
    Los «valores éticos y morales» que taaaaaaaaaaaaaaanto te conmueven, se construyen -respecto a este caso- con los juicios abiertos gracias a este gobierno, y gracias a las leyes de impunidad derogadas durante este gobierno, y gracias a los indultos revocados por este gobierno.

  12. 8:14:
    1-Seguís repitiendo como lorito. Para empezar, hablás de un «dólar dibujo» dándole entidad, por oposición lógica, a un dólar ilegítimo. Sobre eso armás todo tu razonamiento.
    Para seguir: aún dando por cierto que el dólar oficial fuera un «dibujo» seguís sin poder explicar tu «teoría» de que no hubo desendeudamiento en una realidad sin ese «dólar dibujo» (la mayor parte del período kirchnerista). Toda tu teoría se basa en el «dólar dibujo». Entonces… ¿Debo entonces asumir que aceptás que hasta la aparición del dólar blue si hubo desendeudamiento? Pregunta obligada: ¿Por qué si hubo desendeudamiento hasta la aparición del dólar blue y no después?
    2- «chiste pedorro», dije. Está claro que no es un chiste propiamente dicho, no tenías que aclararlo, cráneo.
    «La gente sigue durmiendo en la calle, hay más villas y las que había han aumentado su población (aunque esto te parezca bueno, no lo es), se debe más guita que antes y Pelé debutó con un pibe.»
    Como de costumbre, cuando perdés por goleada la discusión del tema A (desendeudamiento que se mide con el ratio deuda / PBI) sacás a relucir el tema B (PBI a secas, para hablar de algo como la desigualdad cuando este indicador solo no sirve para eso). Para dar cuenta de eso que pretendés dar cuenta tenés que, como mínimo, apelar al PBI y al Gini y compararlo con el de otros períodos (no una foto, sino la evolución y la tendencia de cada período completo).
    Por cierto, que haya más villas no implica necesariamente que haya más pobreza. Te lo explicaría, pero parece demasiado complicado para vos. Si me lo pedís te linkeo una explicación bastante certera que refutaría esa «teoría». Si no la entendés ya es cosa tuya.
    Por cierto II: la gente que hay durmiendo en la calle es mucho menor en cantidad a la que teníamos a fines de los 90’s.
    ¿Alguien recuerda esas colas interminables de gente que esperaba que algunos locales de comida rápida (y algunos resto de P. Madero, ni hablar) tiraran las bolsas de basura llenas de comida.
    Finalizando y fuera del campo de la argumentación: sinceramente me produce mucha risa (y algo de indignación también) que alguien como vos se muestre preocupado por los pobres que duermen en las calles.
    papu: seguís sin entender. Y para peor, dejás cada vez más claro (tu incapacidad para la comprensión de este particular)conforme vas sumando misivas.

  13. Ningún número me cambia el concepto que tengo de la dictadura. Pero tampoco el que tengo de los K.
    Un gobierno democrático tiene que fundarse en valores jurídicos, éticos y morales muy superiores a los de una dictadura, que con sólo sacar los tanques a la calle ya puede «mandar» (sí, para desgracia de Cris -y por lo visto también tuya- la vida del gobernante en una república es muchísimo más jodida que la de un dictador).
    ¿Aparecen fosas con 20.000 cadáveres? Evidentemente no.
    ¿Los legajos de las personas que figuran como desaparecidos en el Nunca Más están abiertos para que todos los interesados en saber qué pasó en ese época -independientemente de la ideología que tengan- puedan acceder a los mismos para estudiarlos? Lamentablemente no.
    ¿Por qué la Secretaría de Derechos Humanos restringe el acceso a esa información que es tan importante para resolver un tema controversial que no puede cerrarse? No lo sé, ¿vos sí?

  14. No sé por qué dicen 30.000 , o de dónde salió ese número
    A mi no me modifica en nada el concepto que tengo de la Dictadura
    ¿A vos sí?
    El gobierno no se puso a contar las víctimas, pero mandó en cana a casi 400 tipos por delitos de lesa humanidad. Qué panchos los del gobierno.
    Ahora yo te pregunto: a 30 años de finalizada la Dictadura, siguen encontrando fosas con cadáveres (hace unos meses en Funes, cerca de Rosario). ¿Será que no es tan fácil?

  15. Algo que no entiendo, y en lo que seguramente Marce me podrá ayudar.
    Siendo que desde el punto de vista legal, religiosos y/o moral cargarse desde el Estado a 7000 tipos no es menos grave que hacerlo con 30.000 ¿por qué mierda hace 30 años siguen repitiendo el verso de los 30.000?
    PD: ¿es creíble un gobierno que dice estar comprometido con la causa de los DDHH, de la memoria, la justicia y la bla, bla, bla… que durante toda una década no tuvo tiempo para ponerse a contar las víctimas y saber en realidad cuántos son?

  16. O sea que debo confiar en un gobierno que de odiar a Irán lo ama
    no ama a Iran. Hizo un acuerdo para interrogar sospechosos
    que de echar a Repsol se asocia con chevron
    son cosas completamente distintas. Repsol era DUEÑO. Con Chevron se asoció para un emprendimiento en particular
    un gobierno q me dice q estoy mejor q los canadienses
    no dijo eso: sólo hizo una comparación de reservas
    y q como con 6 pesos por dia.
    no dijo eso: 6 pesos era (ya está desactualizado) lo que necesitaba gastar una persona en alimentos equivalentes a la cantidad mínima de calorías y proteínas para no morir de hambre.
    TDCUB
    te dejé como un boludo.

  17. O sea que debo confiar en un gobierno que de odiar a Irán lo ama, que de echar a Repsol se asocia con chevron, un gobierno q me dice q estoy mejor q los canadienses y q como con 6 pesos por dia. Resumen en el bcra no hay un puto billete
    mogolito,que no te de un infarto te estás enojando demasiado.
    si te moris -dios no lo permita- me aburriría como poco sin tu cara babeante atrás del teclado.
    PD: Tirate un peso, así aflojas la presión intrcraneal

  18. Justamente. Cuando comprobo que los anteojos no le servian para ver a las mujeres a traves de la ropa, empezo a incubar esa personalidad explosiva y a odiar al liberalismo perverso que lo habia enganhado

  19. Nicolasito lee la publicación de la Sociedad Rural y se sorprende de lo malos que eran los indios, mientras se toma un vaso de Roundup.

  20. Si, recibido despues de hacer un curso por correspondencia, el mismo que hizo Cristina para recibirse de abogada. En Patoruzito te ofrecian el combo ingeniero-abogado-detective privado

  21. Cuando aprendas a convivir con tu discapacidad mental, marcelito, tu vida va a ser un poquito mas tolerable. Aceptala y vas a sufrir menos….

  22. Calmate histérica, pará la mano.
    No desmitifiqué nada, simplemente me sorprendí al conocer el criterio tan laxo utilizado para contar a los desaparecidos.
    Tenés arena en la vagina, idiota? Ya saltás con cualquier cosa. Lo tuyo es tergiversar, tergiversar y tergiversar.

  23. No escupo mierda a los 4 puntos…
    sólo a vos y a un par mas
    lo mismo que hacés vos conmigo, entre terminar de limpiar una letrina y empezar con otra.

  24. marcelito… hablando de lacras… que changa esa de ser …» empleado en relacion de dependencia»… y pasarse el dia escupiendo mierda a los cuatro puntos cardinals de aca..
    Evidentemente tus servicios como ingeniero en la «siderurgica» son tan incompetentes como tu vida misma y prefieren tenerte encerrado donde menos daño podes hacer..

  25. Nicolás, figuran como desaparecidos hasta los montoneros que inentaron copar el Regimiento de Infantería de Monte en Formosa, durante el gobierno de Isabel.
    Y claro que sus deudos fueron beneficiados con la tarasca reparatoria, vea.
    El video de la entrevista que le hizo Osvaldo Quiroga a Ceferino Reato, no tiene desperdicio ->http://www.youtube.com/watch?v=Ppqw_f2M9ZQ

  26. El idiota de Nicolasito cita a Ceferino Reato para desmitificar la cantidad de asesinados por la Dictadura.
    La próxima fuente que va a citar es «Memorias del Excelentísimo Ex Presidente, General Videla»

  27. Del artículo de Ceferino Reato:
    «Se trata de una categoría muy general, que abarca a personas que fueron fusiladas en intentos de fuga que fueron fraguados y a muertos por grupos paraestatales, pero también a jóvenes fallecidos en tiroteos, durante ataques a cuarteles y comisarías o fusilados por los propios grupos guerrilleros a los que pertenecían, en cumplimiento de sentencias de «juicios revolucionarios», como fue el caso del cordobés Fernando Haymal, de 26 años. Figuran, además, personas que murieron mientras armaban bombas que estallaron antes de lo previsto.»
    No sabía éso. Todo sea para que «los jóvenes maravillosos» se les lave el pasado y sean elevados a «santos» del Modelo.

  28. I’m always in your mind… marcelito..
    Aun recuerdo cuando la buena de Hebe, entrevistada por Jorge Lanata ( cuando aun este no era el malvado golpista y alter ego de Magnetto), le respondio, a una pregunta suya sobre el ataque a las torres, el 12 de Septiembre de 2011, que los muertos estaban bien muertos, que por fin…al monstruo le habian pegado en su panza ( reproduccion casi textual). Lanata, algo sorprendido, intento arreglarla diciendo:
    – Pero Hebe, habia mucha gente en las torres que no le habia causado ningun mal a nadie-, a lo que Hebe respondio;
    – Si trabajaban en las torres, eran parte del monstruo y bien muertos estan..
    Todo un canto de amor de la defensora de los DDHH, verdad.
    Lo del baño : Es interesante ver que la discapacidad de marcelito le impide elaborar que hay cientos de miles de inmigrantes en EE UU, no solo de America Latina, y el hecho de ser inmigrante no te quita el respeto de nadie ni te obliga, exclusivamente, a hacer tareas de limpieza. Que ser inmigrante no te obliga a sobar a ningun «patron», y que, al menos en las universidades, un inmigrante puede, por ejemplo, ser jefe de un departamento, aunque el inmigrante sea argentino, cubano, Pakistani o chino. Al menos en las universidades no te valoran por donde venis, sino por lo que sos. Supongo que a marcelito le iria muy mal aqui, y no por ser » inmigrante

  29. ¿Ustedes creen que a Marcelo, y a toda la runfla Nac&Pop, le importan los famosos desaparecidos? Sólo son números, herramientas que le permiten hacerse el santo y condenar a los que no comulgan con sus dogmas, los desaparercidos le sirven para obtener superioridad moral y hacer un lado cualquier crítica bajo el rótulo: «Pando cacerolo milico tortura».

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