Regresó como volvió el Diego en 2001 para el partido homenaje en la Bombonera: con una puesta en escena digna de final de Copa Libertadores, fuera de forma, sin ritmo, visiblemente puesta, pero con algunos toques de magia. En una Casa Rosada decorada con reidores oficiales que tienen cargos de funcionarios, gobernadores que se hicieron la Semana Santa enterita viajando a Buenos Aires para un anuncio pedorro, Andrea del Boca aplaudiendo como foca en Mundo Marino y un buen grupo de mujeres notoriamente embarazadas, reapareció la Presi.
Averiguar qué onda con la hipotensión arterial ya fue. Ahora, lo «in» está en lograr una comprensión lineal de lo que dice Cris en sus discursos. Había que mostrarla viva, generando agenda, y para eso nada mejor que una cadena nacional festejando lo que ya había anunciado en el discurso ante la Asamblea Legislativa hace menos de 45 días: la extensión de la Asignación Universal por Hijo a las embarazadas. Como eso parecía poco para hablar más de 5 minutos, también avisó que iba a mejorar la oferta de cobertura del PAMI para los medicamentos, incluyendo los oncológicos, lo que demuestra una gran visión de estadista: Si tienen la misma calidad de los que venían ofertando desde la Superintendencia de Salud hasta hace unos meses, el problema de los jubilados pobres se habrá solucionado en pocos tiempo.
En un pasaje del discurso parece que le volvió a fallar el bombeo de sangre: comenzó a hablar de turismo con una película chilena sobre jubilados enamoradizos, saltó a Aerolíneas Argentinas y finalizó diciendo que el Estado de Bienestar tiene mala prensa. Luego se le dio por ponerse los lentes, agarrar los papelitos y empezar a tirar números cual niña cantora de la Lotería Nacional dopada. Número tras número, nos hablaba de como mejoró la calidad de vida de la gente que antes se moría por culpa de la Hepatitis B y que ahora se salva gracias a «la vacunación de la vacuna«(sic). Envalentonada por la inercia mandibular, siguió con la reducción de la mortalidad provincia por provincia, a pesar de los aborígenes golpistas cabeceadores de balas estatales de Formosa, que en un clarísimo complot con el cipayaje internacional, se alían con los chicos que deciden no comer hasta convertirse en querubines. Lamentablemente, contra la inanición no hay vacuna.
El momento de climax oral comenzó a acrecentarse cuando mencionó los datos de indigencia y pobreza -medidos gracias al arte renacentista de Guillote Moreno- se magnificó cuando dijo que nadie le agradece las políticas que facilitan el crecimiento empresario -como si fuera una limosna y no su deber de máxima autoridad administrativa- y estalló en un orgasmo kirchnerista cuando aparece «él», el todopoderoso del prebendismo, el omnipresente de la patria subsidiada. «De lo único que no te vas a arrepentir en la vida, es de tenderle una mano a los que más lo necesitan», recordó la Presi que le decía Néstor cada vez que Moyano le pedía una manito judicial; o D´Elía algunos miles de plancitos sociales; o los chicos de La Cámpora algunos cientos de carguitos y otros milloncitos de dólares para bancarse las viandas. Sin embargo, parece que a Cris no le cabe mucho que los pibes del Máximo se patinen la caja de Aerolíneas, debe ser por ello que cerró su clase magistral de oratoria marciana con una frase de Sabina: Que ser valiente no salga tan caro.
Por lo pronto, el panorama no pinta lindo para el futuro. Con un país que se sigue endeudando para adentro, se ve difícil la supervivencia a mediano plazo después de octubre, gane Cristina con su 33% de intención de voto, no se presente o gane Guillermo Cherasny. La relación oposición-oficialismo mantiene la lógica de la historia de la humanidad, estando a la altura una de la otra. Cuando hablo de atomización del electorado, traiciones acomodaticias por una porción de la torta del poder, narcisismo exacerbado y contradicciones partidarias, podría estar refiriéndome a cualquier grupo de pretendientes electorales. El alejamiento de los sectores que desde siempre aportaron a un espacio y huyen despavoridos al ver los nuevos dueños del relato histórico del partido, no es patrimonio exclusivo del kirchnerismo, aunque lo lleven al paroxismo con seminarios de Peronismo igual a Kirchnerismo.
Así estamos, jugando a ser cigarras en un país que es un hormiguero vacío.
Martes. La vida es eso que pasa mientras sobrevivimos a nuestros gobernantes.